La prevención de accidentes de tráfico es una de las partes más importantes para una conducción segura. Tu coche te protege mediante sistemas de seguridad activa, y de seguridad pasiva, pero como ya sabes, el otro elemento importante en la ecuación eres tú, conductor.
Gracias al avance en investigaciones sobre educación vial y en campañas diversas para evitar accidentes por causas prescindibles, los conductores están más preparados para evitar situaciones de peligro. Además, la DGT y otras instituciones ofrecen noticias y cursos de fin de semana para aprender y perfeccionar la conducción evasiva.
Estos cursos son una formación complementaria a la que has recibido en la autoescuela. Por si tienes motivos que te impiden acudir, por ahora, a este tipo de formación, desde Toyota os facilitan las primeras pinceladas de qué son estas maniobras evasivas y cuándo deben ser utilizadas. ¡Atento!
¿Qué son las maniobras de evasión?
Se trata de una serie de gestos al volante que pueden prevenir un accidente con diferente grado de gravedad. En función de la fase del accidente en la que nos encontremos, podremos ejecutar alguna de las maniobras con mayor o menor éxito y eficacia. De ahí la importancia de esta formación complementaria que ofrecen los cursos o la experiencia al volante.
Entre algunas de las maniobras encontramos:
- Simples. No tienen un riesgo potencial para el conductor. Pueden ser tanto activas como pasivas. En las maniobras pasivas se previene al otro implicado (peatón o conductor) del riesgo que hay. El aviso se efectúa mediante ráfagas de luz, avisos acústicos con el claxon o destellos lumínicos.
- Entre las maniobras activas ya hay un aviso serio de una de las partes para evitar una posible colisión por la falta de reacción del otro conductor. Las básicas son parar el coche, aumentar o reducir la velocidad y girar a una de las direcciones para evitar la colisión.
- Complejas. Estas acciones combinan todas las maniobras simples. Se utiliza para reducir exponencialmente la gravedad del accidente. Algunas son la frenada con giro hacia uno de los laterales, frenada rápida y brusca con giro, acelerar para ganar velocidad y girar para evitar al otro vehículo, o claxon a ráfagas y una fuerte frenada.
Fases que tiene un accidente
A continuación te desgranamos las fases o etapas que tiene un accidente de tráfico, desde que antes hasta que la colisión se ha producido.
1. Fase de percepción. La primera parte y en la que se ve si el accidente se debe a un error propio o no. Según diferentes estudios, del 70 al 90% de los accidentes de tráfico se deben a un error humano.
2. Fase de decisión. A esta altura se realizan las maniobras de evasión. El conductor inicia la reacción para evitar la posible colisión, decide qué maniobra llevar a cabo para no chocar con quien viene de frente.
3. Fase de conflicto. Aquí el suceso ya se ha producido, con los vehículos ya colisionados y estáticos dentro de la llamada área de conflicto.
Asegúrate las espaldas
Estas descripciones tan desmenuzadas de cómo se produce un accidente sirven tanto para que las autoridades investiguen las causas del mismo, como para concienciar al conductor. Para ir con una buena cobertura en carretera, contrata un seguro adecuado a tus necesidades. Puedes comparar unos con otros y, en función de lo que necesites, elegir la mejor opción. En Toyota disponemos del primer Seguro que beneficia la conducción eficiente del conductor.
En los diferentes modelos de Toyota se integra la tecnología Toyota Safety Sense para una conducción más segura. Entre las tecnologías que integra hay un avisador de cambio involuntario de carril, sistema de seguridad pre-colisión con detector de peatones y ciclistas, reconocimiento de señales de tráfico y control de luces de carretera. Una ayuda más para una conducción segura en carretera.